miércoles, 22 de febrero de 2017

Volver a encontrarse

Cada vez que te escribo hace más tiempo que no se nada de ti.
Cada vez que te escribo hace más tiempo que empezaste a doler.
Cada vez que te escribo el dolor se hace más liviano, más llevadero.
Cada vez que te escribo el motivo es el mismo: me dueles.

Me dueles en el alma.
Me dueles en el corazón.
Me dueles en el cerebro.
Me dueles en la piel.
Me dueles en los ojos.
Me dueles en el recuerdo.
Me dueles en tu olvido.

Hace tiempo que se me olvidó cómo suena tu voz.
Hace tiempo que no recuerdo cómo se dibujaba tu sonrisa.
Hace tiempo que no recuerdo tus abrazos.
Hace tiempo que todo acabó.
Hace tiempo que cerré la puerta 
-te juro que no quería que entrara más nadie-
pero me dejé abierta la ventana.
Hace tiempo que no dejaba entrar a nadie.
Pero no hace tanto tiempo que alguien se coló por mi ventana.
No hace tanto tiempo que hay alguien que me cuida de nuevo.
No hace tanto tiempo desde que hay alguien que se encarga de reparar tus daños.

No hace tanto tiempo desde la última vez que vi esas fotos en las que salíamos.
Pero si hace mucho tiempo que las veo y no reconozco a nadie
al fin y al cabo salían nosotros 
y ahora eres y soy yo, pero no nosotros.

Hace tiempo que no me sentía tan bien en un abrazo.
Hace tiempo que nadie se empeñaba en que saliera la de verdad.
Hace tiempo que la de verdad estaba escondida.

Pero está empezando a salir, 
y no es para buscarte, 
                                                                      sino para encontrarse de una vez por todas

miércoles, 15 de febrero de 2017

Hablando de tu boca

Puedo escribir los mejores versos hablando de tu boca
                        
Puedo escribirlos porque ella 
                                       es el artífice 
                                                   de que puedas 
hablar con esa gracia que te caracteriza       
  
Puedo hacerlo porque sólo yo 
                      sé describir cómo se mueven tus labios cuando hablas feliz
      
Puedo redactar una a una todas las palabras que tu boca articula
                     
Puedo escribir aun mejores versos si hablo de tus morritos

Esos que salen a pasear siempre que hay una foto a la vista                        
Esa forma tan tuya de posar que te hace, 
si se puede,                 
aún más guapa.

Por no hablar de lo que podría hacer si quisiera transmitir tu sonrisa...

Si quisiera que conozcan tu sonrisa
                           podría hablar de la forma 
tan perfecta 
            en que tus labios se arquean
 formando una luna blanca de dientecitos rectos     
    
Si quisiera que conozcan tu sonrisa, 
mi vida,                  
                            tendría que explicar 
cómo sólo sonriendo despejas las nubes del cielo
        
Podría escribir los mejores versos, 
si quisiera que conozcan tu boca...  
                     
pero, desde que la conozco yo, 
                       no quiero que nadie más lo haga, 
                                            porque la quiero sólo para mí

martes, 14 de febrero de 2017

Tres angelitos


Yo estoy enamorada de mi suerte, pues tengo toda la suerte del mundo.

Tengo tres angelitos que me cuidan y me quieren.
Tengo tres angelitos y están en la Tierra, no en el cielo.

Tengo tres angelitos que me abrazan en los peores momentos.

Tengo tres angelitos que convierten en hogar cualquier lado en el que estén juntas y conmigo.

Tengo tres angelitos que crean los mejores recuerdos y los sentimientos más verdaderos que este corazón puede sentir.
Tengo tres angelitos y se me llena la boca hablando de ellas porque no hay nada que me haga sentir más orgullosa en este mundo.
Tengo tres angelitos por las que muero o mato.
Tengo tres angelitos y no podían ser más ni menos porque se complementan la una a la otra, porque cuando están conmigo nada nos falta.

Una de mis tres ángeles es callada, observadora, paciente y perfeccionista. Aunque también es dormilona, pavita y sensible. 
Ella con sus grandes ojos, su larguísimo pelo negro, sus paseos en toalla tras la ducha y sus camisas de rayas.
Ella con ese corazón y esa sonrisa fue la primera en entrar en mi vida de las tres... 
Aún recuerdo como me saludaba antes de conocerme cada vez que me veía como si supiera ya que nuestras vidas estarían unidas para siempre.

Otra es tímida, alegre, inquieta, curiosa y fuerte. Aunque esta es mi madre, mi hermana y mi hija a la vez, es la que más me riñe, la que siempre sabe mejor cómo me siento y qué necesito.
Ella es una casualidad del destino que nos quiso unir en un autobús en Francia. 
Ella que es grande y dura no sabéis qué corazón tan tierno tiene.
Ella con su altura, sus rizos, su pasión por el deporte y las estrellas.
Ella con su infatigable lucha por llegar a ser quien quiere ser.
Aún recuerdo aquel autobús que nos unió sin esperarlo y aquellas llamadas diarias en las que hablábamos horas y horas sin darnos ni cuenta.

La que falta, no es menos importante en absoluto, es fuerte, decidida y madura, a la vez que risueña, dormilona y achuchable.
Ella que es tan chiquita y tan grande a la vez.
Ella con sus abrazos y sus tonterías que hacen de la vida algo mucho más gratificante.
Ella que me perdona siempre que me duermo con las pelis.
Ella con una sonrisa tan grande que podría mudarme allí a vivir y con un corazón más grande que ella entera.
Aún recuerdo cuando me tenía miedo y huía de mí; aún recuerdo nuestro primer abrazo, ese que nos dimos sin saber que nos uniría para siempre.

Son mis tres ángeles, cada una es de una manera, pero todas son preciosas y necesarias. 

No me faltéis angelitos míos.


Os quiero, esté, estéis o estemos donde quiera que sea.
-NRG
-RDG
-MRM

miércoles, 1 de febrero de 2017

Porque sí

Quiero quererte porque sí

Porque me da la gana
Porque la vida es maravillosa y 
me ha puesto a alguien 
maravillosa en mi camino

Quiero quererte porque no sé no seguir lo que me dicta mi corazón
Porque me niego a seguir al rebaño de ovejas y hacer lo establecido

Quiero quererte porque merezco poder 
                 expresar mis sentimientos aunque no está de moda


Porque mereces a una persona que te quiera       
y te cuide

Quiero quererte porque ya hay demasiadas cosas superfluas en este mundo
Porque hace tiempo que nada me parecía tan sincero

Quiero quererte porque me he cansado
                              de que nadie sienta nada
Porque yo sé que me quieres

Quiero quererte aunque implique un riesgo
Porque la vida sin un riesgo no es vida

Quiero quererte porque 
no me imagino una vida sin querer
Porque tú parece que me lo vas a devolver

Quiero quererte aunque sea "demasiado pronto"
Porque el amor no entiende de fechas

Quiero quererte sin límites
Porque el amor no caduca 

Quiero quererte porque tu sonrisa ilumina mis demonios
Porque hace tiempo que estaba demasiado oscuro ahí dentro

Quiero quererte porque ya lo hago
                                    Quiero quererte porque sí
                                                                Porque me da la gana

-TPG

miércoles, 25 de enero de 2017

No me la juego

No me la juego si te digo que te quiero.

No me la juego porque lo sabes.

Sabes que te quiero con tus manías, con tus defectos, con tus demonios...

Tú me quieres con mi intensidad, con mis inseguridades, con mi forma de ser ...

Y esa, amor, es la puta clave.

La clave está en cultivarlo poco a poco, con mimo.
La clave está en ser de verdad, en no tener filtros,
                                                                  cuando estamos uno en frente del otro.
La clave está en demostrar que los hechos son los que valen.
La clave está en mimar y arropar.
La clave está en nuestras mentes,

porque el amor es algo innato del ser humano, o eso dicen.

Así que no me la juego si te digo que te quiero...
porque sé que me quieres.

No me la juego si te digo que te quiero...
 porque sé que lo único que quiero al despertar, es ver tu cara.

No me la juego si te digo que te quiero...
porque todo lo demás, 
ya no importa

miércoles, 4 de enero de 2017

Petición matutina

Dicen, que cuando uno sueña con alguien
significa que ese alguien se durmió pensando en ti...

En ese caso, no entiendo cómo, 
en vez de pensarme, 
no prefieres hablarme.
Amor, pensaba que el tiempo curaría la herida que me has dejado, 
te lo prometo,
pero cada día me duele(s) 
                                                 más 
                                                           y 
                                                               más...

Desde que te fuiste siento que hay algo que me presiona el pecho 
y no me deja respirar.
Yo estaba acostumbrada 
                                        a tus idas 
y venidas, 
                                                                         al fin y al cabo, 
                          siempre volvías, 
pues tu amor por mí, 
siempre te hacía volver.

Pero esta vez desapareciste sin piedad.

Amor, 
estoy dispuesta a escuchar y perdonar, 
pero vuelve o acabaré enloqueciendo.
Vuelve.

No lo hagas por ti, ni por mí.

Hazlo por la historia.
Hazlo por el invierno o por la primavera.
Hazlo por una tarde de sol en la playa...

Pero vuelve, 
aunque sean unos segundos
                                                                               o unas horas
no me voy a quejar si es toda la eternidad...
Simplemente, vuelve

miércoles, 28 de diciembre de 2016

tu musa

No te enteras

Podría haberlo sido todo.
Podrías haberme convertido en todo.

Pero yo no quise ser tu musa más puta. 
Eso, te lo podía ofrecer cualquiera, 
   yo quería ofrecerte más...      
Más, de lo que tú querías recibir.

Podría haber sido tu musa más atenta.
 Esa que estuviera siempre pendiente de que tu sonrisa seguía encendida.
Podría haber sido tu musa más cuidadosa. 
Esa que te lamiera las heridas y pudiera dar 
de nuevo forma a tu corazón pisoteado.
Podría haber sido tu musa más cariñosa. 
Esa que te abrazara siempre por sorpresa 
y te llenara la cara de besos sin motivo.
Podría haber sido tu musa más comprensiva. 
Esa que siempre escuchara antes de juzgar 
y que perdonara todo.
Podría haber sido tu musa más paciente. 
Esa que esperaría siempre por ti.
Podría haber sido tu musa más entrometida (en tu corazón). 
Esa que buscaría un hueco para no marcharse nunca.
Podría haber sido todas las musas en conjunto.
Pero nunca podría ser tu musa más puta,
 porque fue una de esas
 la que te partió el corazón.

Y yo, mi amor, 
a eso no 
estoy dispuesta.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

Yo conocí la magia

Una vez me dijeron que los magos reales no tienen trucos

En ese momento no lo entendí, aún no conocía la magia.
Yo siempre creí en la magia de las películas y la de los magos que hacen trucos en la tele.

Nunca presté atención a lo de que los magos de verdad no tienen trucos.
Nunca hasta que me vi por primera vez en tus ojos.

Ese choque de miradas sí que fue mágico. 
Ahí empecé a entenderlo todo.
Me partiste en dos con una mirada y me recompusiste con una sonrisa.
En cuestión de segundos.

Que me llamen loca pero yo conocí el significado de magia cuando te miré mientras dormías.

No tardé mucho en comprender que la magia eras tú.
Y yo podía ver cómo iluminabas los días
                                     cómo me leías el alma, mirándome a los ojos.
Yo podía sentir tu magia, en mi piel, casi desde el primer momento.

Quizás ese fue el problema, vi tu magia demasiado rápido.
Tan rápido que te asustaste al no ser consciente de ello.

Me pregunto cómo no te habías dado cuenta 
de que con una sóla palabra podías hechizarme
                           de que podías hacerme enloquecer
                                  de que podías, incluso, matarme si hubieras querido...

Me pregunto cómo no sabías que dentro de ti había pura magia.

Huíste cual gacela en peligro cuando te llamé mago.
Te asustó verme hablar, tranquilamente, de tu luz
del poder de tu mirada y el de tus palabras.

Te asustó que descubriera tu magia porque tú
 aún no habías descubierto la mía.

Y huiste sin mirar que dejabas detrás un corazón hechizado
 que no palpita, si no es con el son de tus palabras,
y que late con serias dificultades 
en lo que se encuentra a ti
o al contrahechizo

Si te encontrara te retendría 
          hasta que vieras que, 
                   gracias a ti, 
                        también hay magia en mí.

Que las flores veían la primavera a mi paso cuando estabas esperándome.
Dudo que te encuentre, ahora allá por donde paso se va convirtiendo en invierno y lluvia.
¿Ves? yo también tengo magia...

Pero no sabes que 
"Lo esencial es invisible a los ojos.
Sólo con el corazón se puede ver bien"



miércoles, 14 de diciembre de 2016

¿Y si se equivocan?

Hoy, años después del cataclismo que interrumpió 
que tu camino siguiera ligado al mío.  
Hoy, sigues doliendo.

Siempre tuviste la molesta habilidad de escapar ante las dificultades

No dejé (ni dejo) de buscarte
en otras personas, 
              en otros lugares,
                           en películas,
                                         en perfumes,
                                                        en la lluvia....

Sin embargo, tu te diste por vencido en el momento del impacto
y tiraste en dirección contraria
... sigues comunicando...

A veces he llegado a olvidarme de mí tanto 
que me he olvidado hasta de quien era, 
mientras seguía tus huellas.

Te he necesitado tanto.

Me has dolido (y me dueles) tanto que creía que me moría

Aún así, mírame, aquí sigo, tratando de encontrarte,
mirando al cielo cuando se pone del color de tus ojos
                                      y
                                              oyendo la risa del viento imitar la tuya

Dicen que el que se va y no vuelve, 
                                                  no merece la pena
pero... ¿y si se equivocan?

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Impotencia


Impotencia 

Siento impotencia al ver, desde la distancia, cómo le rompen el corazón a alguien a quien quiero con toda mi alma.
Daría lo que fuera por poder estar a su ado en todo momento y ser su muleta.
Daría lo que fuera por poder asegurarme que esos ojos no derraman una lágrima más.
Daría lo que fuera por poder darle un abrazo, de esos que protegen y alivian.

El problema está en que no entiendo cómo hay gente que se atreve a dañar a seres tan maravillosos. 
No entiendo cómo no ven lo que ven mis ojos...

Y entiendo que el amor te tapa los ojos y  te impide ver la realidad...
Puedo llegar a  entenderlo.
Pero no puedo entender es que le despedacen el corazoncito sin piedad ni remordimientos a alguien.

Si pudiera metería a muchas personas en la cárcel por partir y robar corazones con prevaricación y alevosía.

Por que lo que nunca voy a entender es la infinitad maldad humana.
Y a la gente que no ama y hace daño

miércoles, 30 de noviembre de 2016

La lucha sin fin

No lo consigue
Mi subconsciente  no es capaz de olvidarse de ti.
No lo consigue.
(Mejor dicho, no lo consigo)
Por más tiempo que pasa no hay forma.

Aparentemente, ya no hay nada.
Aparentemente, ya me olvidé, pero no es verdad.

Más de una noche me despierto con una angustia que me presiona hasta ahogarme.
Más de una noche sueño con finales alternativos.
Más de una noche despierto rompiendo en llanto repitiendo el final real.
Más de una noche sueño que nuestra vida sigue enlazada.

Y ya no se me ocurren más métodos.
Ya no sé que más hacer.
De hecho, sólo sé que no quiero nada
que tampoco te quiero a ti.


Quiero paz.

Así que,         
             por favor,     
devuélvemela

miércoles, 23 de noviembre de 2016

Pisaste fuerte

Durante un tiempo creí que alejándome de las cosas que se relacionaban contigo acabaría mi agonía.

Sí, pensé que dejando de oír nuestras canciones se acortaría el proceso.
Creí que si no miraba nuestras fotos todo se esfumaría de mi mente poco a poco.
Llegué a pensar incluso que si dejaba de ir a los sitios que me recordaban a ti te olvidaría antes.
Fui tan tonta como para creerme que si dejaba de hacer, ver y oír las cosas tal y como lo haciamos juntos, todo sería más fácil.

Hasta eso hice mal.

Creía que así, quitándome de todo eso, sería de nuevo yo misma.
No me daba cuenta que para ser yo misma necesitaba las costumbres que tú habías introducido en mis hábitos.
Esas canciones que oía como ejercicio de buena energía cada mañana.
Esos lugares donde contigo o sin ti encuentro paz e inspiración para seguir hacia adelante.
Esas fotos que no son más que el reflejo de que no fue una ilusión de mi mente.

Todo el mundo deja su huella en la vida de los demás.

Pero es que en mi vida, pisaste fuerte, 
y la huella, de vez en cuando, duele.

miércoles, 16 de noviembre de 2016

Las Claves

Hay días en los que no tenemos claro nada, 
que nos planteamos la vida y nos cuestionamos todo.

Sólo se necesita la respuesta a 3 preguntas para encontrarte cuando no sabes ni quién eres:

  1. ¿Dónde vas cuando estas triste?
  2. ¿Con qué personas compartes absolutamente todo lo que pasa por tu mente?
  3. ¿Cuál es tu mayor sueño?

Te aseguro que ahí tienes la base para reencontrarte. 
Piensa bien antes de responderte y 
respóndete con sinceridad pues engañarse a uno mismo sólo provoca dolor.

Debes buscar en tu mente, en tu vida una razón de ser y de actuar.

Debes buscar el motor que hace que te levantes de la cama cada día.

Pero una vez hecho eso lo más importante es que te des cuenta de que tu vida gira en torno a ti 
que te ames.

Amor (propio)
Amistad (verdadera) 
Confianza (en ti mismo)

Yo te he dado las claves para encontrarte y amarte a ti mismo.

Sólo falta que le eches corage y consigas tomar las riendas de tu vida
¿Te atreves?

miércoles, 9 de noviembre de 2016

Esta vez gané yo

Te habría seguido a cualquier lado.

Te habría dado las razones que necesitabas para seguir junto a mí.
Me habría tragado mi orgullo dos cientas veces más. 

Te juro que hubiera sido así. 

Y, aunque no me creas,
     puede que yo sea la única persona que jamás te ha mentido.             
          
Podría poner la mano en el fuego por el amor y la lealtad que te tuve un día y no me quemaría.

Fuiste tan idiota que rechazaste tanto por nada. 
Y, por tu culpa, yo perdí pero también gané.

Gané en mí misma. 

Sí, gane yo, lo creas o no. 
Yo gané por todo lo que he ido aprendiendo.

Aprendí a lamerme mis heridas y a recomponerme. 
Ahora sé no confiar en cualquiera.

Me enseñaste que no debo esperar nada de nadie, porque esperando me puedo morir. 
También aprendí que no hay que poner la mano en el fuego por nadie.

¿Sabes por qué?

Porque quien juega con fuego, se quema.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

La diferencia

 Siempre he tenido unos gustos diferentes y 
unas preferencias de ocio poco comunes.

Desde pequeña sé disfrutar y valorar estar en mi propia y exclusiva compañía. 
De hecho, aunque me considero extremadamente sociable, siempre he marcado mi espacio y tiempo personal como algo sagrado.
Pero eso me convierte en "rara", ya que no es muy común eso de llevarse tan bien con uno mismo, tal y como yo me llevo conmigo misma. 

Siempre he disfrutado de una tarde de lluvia con una mantita y un buen libro o una buena peli;

de un atardecer en septiembre junto a la orilla del mar;

de tumbarme con cascos y oir música tras un día de estrés;

de las sonrisas sinceras que me regalan mis seres queridos;

de los detalles tan pequeños como un "te quiero" en el espejo;

de la brisa de las noches de verano;

del olor a chimenea o a tierra mojada...

Siempre me ha gustado sentarme de espalda al sol en otoño para sentir su frágil calidez treparme por las vértebras, a la vez que la brisa fresca me roza la cara.

Jamás podré explicaros lo que me inspira sentarme a leer o escribir en cualquier banco de cualquier parque mientras oigo a la naturaleza que me rodea.

No obstante, jamás me he autodenominado "rara", de hecho, no creo que lo sea. Yo me considero "diferente".

Lo raro es que el resto de gente 
no se permita difrutar tanto 
como yo de lo que realmente les gusta.

miércoles, 26 de octubre de 2016

Hacia la naturaleza

Quién soy yo para negarme el capricho de sentir el aire acariciar mi piel.

Cómo iba a privarme de aprovechar este espléndido Sol que me mima con cada uno de sus rayos otoñales.

A veces, me siento un poco como un ser fotovoltaico, sobre todo, en invierno cuando las nubes quieren dejar en segundo plano a Lorenzo con sus incesantes lluvias, fruto de los celos que le provocan este.

Si pudiera describir a la perfección la naturaleza cuando me rodea y lograra que sintierais mi sol en vuestra piel, yo ya sería del todo feliz. Pero es que es tan grande lo que veo, lo que respiro, lo que siento que no logro encontrar las palabras para que lo entendáis.

Se me hace difícil asimilar cómo en medio de una enorme ciudad como es Múnich pueden existir lugares tan mágicos y tan naturales 

con sus lagos llenos de patos y cisnes; 

con frondosos árboles perdiendo sus hojas por el paso del invierno; 

con esta brisa que invita a quedarse para siempre; 

con esta paz que emana en cada centímetro, 

que en conjunto hacen que este lugar idilico acabe con toda mi tinta y mi papel.

 Mires a donde mires ves un tono verde vital y lleno de energía.

No os lo he dicho, pero hoy desperté con ganas de naturaleza 
y con un bolero en mi cabeza.            


Y ¿quién soy yo para negarme semejante capricho?

miércoles, 19 de octubre de 2016

El animal más inepto

"Somos adictos a lo que nos destruye".

No suelo ser rotunda pero estoy absolutamente de acuerdo con la cita.

Somos tan estúpidos, todos, que nos enganchamos a la rama más frágil del árbol, sabiendo que es la que menos va a aguantar de todas y que se va a romper dejándonos en el suelo con un buen porrazo.

Nos apasiona, o al menos eso parece, partirnos y desquebrajarnos una vez tras otra. Nos encanta equivocarnos pero sin aprender nada del error.

Y que el ser humano se crea por encima de otras especies animales por el mero hecho de hablar 
y sociabilizar...                        
me parece, cuando menos, el error más grave.

Al fin y al cabo, somos los más tontos. 
Pues, cualquier animal simple aprende de un porrazo, de un error. 

Pero nosotros no, 
nosotros necesitamos reventarnos una vez tras otra, 
llegar al fondo para pararnos a hacer balance y decir:
                                                            "hasta aquí" o "nunca más".

Y es que, estaba claro que 
no íbamos a ser la raza perfecta.
Pero ya podríamos ser menos tontos 
y aprender a la primera.

miércoles, 12 de octubre de 2016

Una vez tras otra


Y volví a intentarlo.

Una vez más,
 cual idiota, 
traté de volver
 a buscarte.
Una vez más, 
en un momento de debilidad,
 traté de volver a encontrar
 una respuesta tuya.
Una jodida vez más,
otra vez,        
intenté intentarlo.
Será que cuando me autodestruyo 
      olvido de que tú ya no estás 
para recomponer mis cenizas conmigo 
       y llevarme de la mano
     mientras sano mis heridas.
Será que cuando yo misma me odio
creo que lo mejor es buscar a quien siempre
 me ayudó a volver a mí.

Será que con los años

 en vez de avanzar   
me estanco en      
 empeñarme en que tú
 vas a volver      
para ayudarme.  
Será que no sé cómo hacer para no destruirme yo sola.
Será que no estoy preparada tras tanto tiempo sin ti.

Cuando vuelvo en mí y veo que he vuelto a llamar a tu puerta
 y no me has abierto...

Me vuelves a decepcionar.           

Me vuelves a defraudar.
No tendrías que haberte ido sin explicarme cómo tratarme a mí misma, como tú lo hacías.

Ese fue tu peor castigo,
 pues sé que será difícil que 
alguien más sepa cómo hacerlo
 y tú pareces de hierro 
porque sé que no tienes pensado
 explicarme cómo hacerlo.
De hecho, sé de sobra,
que nunca lo harás.

miércoles, 5 de octubre de 2016

Vuelve otoño

Hoy el otoño llama a la puerta.


Pues, amanece lloviendo sobre mojado.

Abro la ventana y puedo oler la lluvia, 
                           mientras siento esa brisa fresca que tiene el otoño cuando llega.

Hoy, me despierto con ganas
 y la brisa 
                                             y el agua de otoño 
me dan más fuerzas.

Hoy doy mi más sincera bienvenida a una estación preciosa acompañada de hojas secas de los árboles, lluvias y temperaturas más frías.
En cuanto al invierno 
espero ansiosa su llegada,
 pues está vez traerá nieve.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

Sol y Luna

Lo nuestro es un amor a distancia:
como la noche y el día.
Es más, tenemos el mismo problema:

cuando apareces no estoy y,
cuando estoy no apareces.
¡Ay, Amor nocturno! que sales
tan orgulloso como tu luna.
Apareces tan brillante como tus estrellas
Mas jamás podremos encontrarnos.

Pues el sol jamás me dejará 
mudarme a tu luna.